EL ESTADO DE DERECHO A SUBASTA.

Pues sí, nuestro Estado de Derecho está en venta, mejor dicho, se subasta cada cierto tiempo al mejor postor desde hace unos años, los mismos en que esta aberración que padecemos como presidente del desgobierno se ha arrojado, con mucho gusto, en brazos de filoetarras repugnantes y delincuentes condenados, pero luego indultados, por esta camarilla de pelagatos que forman el actual Consejo de Ministros.

Desde que el Fake, falsificador de doctorados y atracador de urnas - sede del PSOE - llegó al poder, vivimos de sobresalto en sobresalto y de asombro en asombro, ya que, la conducta de este menesteroso moral, falso demócrata y vil individuo, siempre desprende un tufo insoportable a totalitarismo.

Su talante chulesco ante la oposición cuando ésta tiene la palabra en el Congreso o en el Senado y, sus alianzas con lo peor de la política española, constituyeron un hito que, sin embargo, se ha ido superando cada día.

El ínclito e inefable Bolaños, pasó de amenazar con “consecuencias imprevisibles” si el fallo del T.C. no estaba de acuerdo con los cálculos de este desgobierno de sátrapas, a tratar de deslegitimar el mismo, alegando, entre disculpas de mal perdedor y de forma infantiloide, que sólo había sido por la diferencia de un voto, ¿y…? 

Seguramente y en breve - ahora se ha sabido que se la jugaba al ser el autor intelectual de la operación fallida - nos explicará a todos los ciudadanos en qué consisten esas “consecuencias” y, si no es así, habrá que tomarlo como una conminación más con las que han tratado de presionar al mismo T.C. y a la oposición, ya que, amedrentar, desprestigiar e insultar, al mejor estilo del hampa, es algo que emplean con frecuencia esta piara de indignos políticos que forman el actual Ejecutivo. 

Lo único cierto es que ante cualquier fallo judicial que les contradice, en vez de mantener una actitud institucional de respeto a los tribunales, como haría cualquier gobierno que cree en la división de poderes, ponen a faenar a ministros y medios de comunicación para denostarla.

Junto a las amenazas, claras o subrepticias, tratando de tapar sus maniobras totalitarias usan expresiones muy manoseadas; entre las más utilizadas están las de: “democracia”, “golpista”, “progresista”, “fascista”, etc. que encabezan, según el momento, sus peroratas cínicas. 

Es muy frecuente entre los totalitarismos de izquierdas adornarse con la palabra “demócrata”.

No olvidemos nunca la denominación de la Alemania Oriental, dictadura cruel e inhumana que fue un nido irrespirable del crimen, delación, miseria y devastación. Se auto titulaba pomposamente: “República Democrática Alemana”. Por cierto, el siempre sagaz e inteligente ministro Garzón, antorcha de sabiduría y faro del saber, no ha mucho se fotografió con una camiseta que llevaba el escudo de lo que fue ese antro cruel e inhumano del delito político.

Los últimos ataques al T.C. y al CGPJ, confirman el temor que teníamos muchos ciudadanos de que el único organismo independiente que aún resiste, como es una parte del Judicial, sea parasitado y dominado también por esta horda totalitaria infiltrada ya en todas las instituciones.

Sus planes para dinamitar nuestro Estado de Derecho los vemos a diario. El intento de asalto rabioso a ese tribunal es paradigma de lo que hablo. Aprovecharán los resquicios que les permiten las leyes actuales para intentar perpetrar fraudes de ley y desnaturalizar la Constitución. Les es imprescindible por varios motivos: primero, satisfacer sus planes.

Segundo, para evitar que en un futuro, quizás no demasiado lejano, verse procesados por los dislates de lesa traición que están perpetrando contra la Nación Española.

Otras de sus habilidades, cuando cometen un atropello, es acusar del mismo a la oposición. Maniobras de boomerang político de un cinismo que no deja de asombrar. Un método para descargar así sus responsabilidades, apoyados, eso sí, por una brigada informativa imponente. 

Mientras los españoles día a día, en manos de este desgobierno de incompetentes y mezquinos, nos arruinamos y retrocedemos en eso que se ha dado en llamar estado del bienestar, el Fake monclovita, fiel a sus principios de traición y delito, continúa el asalto final para desarmar a la Nación Española y tenernos a su merced. 

Cerró el Congreso y gobernó tiránicamente a base de decretos, algo que no ha dejado de hacer siempre que ha podido y, por la vía de urgencia, para hurtar en los trámites previos, la opinión de los distintos grupos parlamentarios e informes preceptivos de los organismos correspondientes.

Esa misma conducta la hemos visto cuando se ha votado la cruel y monstruosa Ley Trans. Se han prohibido los informes y opiniones de médicos, terapeutas, psicólogos, endocrinos, psiquiatras, padres, etc. Totalitarios aberrantes que nos están sometiendo a sus planes de esclavitud y destrucción de los lazos familiares y sociales. Todo dependerá de los caprichos del Estado, obedeciendo a un plan desarrollado para hundirnos en la indigencia de las naciones.

El Fake en su soberbia enfermiza ya se ve Presidente de la 3ª República; tan sólo observar los desplantes clamorosos, faltas de protocolo y actitud zafia que, siempre que puede perpetra ante la figura del Rey. Pudimos comprobarlo de nuevo en la inauguración de la línea del AVE, Madrid-Murcia, en que con esa descortesía de zote insolente que le caracteriza, se adelantó al Monarca en una muestra más de engreimiento y fatuidad de macarra inveterado.

En las organizaciones totalitarias de izquierdas el primer mandato de las mismas es la violencia en sus diferentes formas, ya sea contra personas, instituciones o leyes. Tratarán por TODOS LOS MEDIOS de destruir, anular y laminar cualquier organización o persona que se oponga a sus maquiavélicos planes de esclavizar y anular voluntades. 

Antes, han procurado embarrar y tensionar todo lo posible el ambiente político, poniendo los jalones que le permitan dar la estocada final a nuestro Régimen Constitucional. No ha habido un solo día, en que estos impostores no hayan promulgado o hecho algún disparate ilegal bordeando el delito. 

Continuamente decretan leyes y disposiciones que están haciendo imposible la vida a la clase media; mientras, rebajan delitos tan graves como pederastia, violación, sedición y malversación. Atendiendo a estos últimos, si una parte de la casta política robaba con leyes que les podrían dar un disgusto, si eran descubiertos; ahora, preparémonos para seguir pagando impuestos y que nos roben a manos llenas. También los golpistas gozan ya de barra libre para sus desatinos.

Vemos zozobra, preocupación e inquietud en la mayoría de los españoles, pero también indiferencia, pasotismo y la apatía suicida de un  segmento hedonista irreflexivo, que ve pasar los acontecimientos como si fueran a estar ajenos al devenir de los mismos. 

Nos esperan unos meses intensos y decisivos que este desgobierno, aprovechando el momento, va a utilizar para tratar de silenciar las discrepancias. 

¡FELIZ NAVIDAD!, y que Dios reparta suerte.